Recomendaciones para las siguientes semanas: Junte agua de lluvia, báñese acompañado, procure no ensuciar mucho la ropa, si pide una pipa de agua a protección civil municipal exija que le den un recibo oficial por los 200 pesos que pretenden cobrarle y que no están autorizados. No tome agua, mejor beba cerveza. Báñese bajo la lluvia, pero antes colecte una cubetita con agua para no quedarse enjabonado por si deja de llover. Estas recomendaciones van porque los jijos de su Pink Floyd de los compinches de La Rata sabotearon la principal red de conducción de agua potable de Palenque. Ni la APPO, ni los “macheteros” de Atenco, ni siquiera los ETAS Vascos o los Talibanes de Bin Laden se atrevieron nunca a dejar sin agua a una población completa. El agua es un derecho humano, sabotearla es simplemente terrorismo y si otro estado estuviéramos, ya no digamos otro país, los causantes de esta abominable acción ya estarían en la cárcel donde les esperaría una larga condena. Pero aquí ya se sabe que no pasa nada y, cuando pasa… no pasa nada. Indolencia, apatía, valemadrismo o vaya usted a saber, el caso es que bloqueos carreteros van y vienen, plantones con “porros” aborígenes también, retenciones forzadas –lo que penalmente es secuestro- se dan como si nada, bajo el argumento de “usos y costumbres”. Y todo como si nada. Veremos qué gestos hacen las autoridades competentes ante este acto terrorista de una turba chantajista que defiende delincuentes bajo el argumento de la “persecución política”. Esto no puede continuar, no se puede ya argumentar tolerancia con quienes realizan de manera deliberada acciones en contra de toda una población, sin distingo alguno. Si no se para en seco, seguiremos como rehenes de cualquier grupo de facinerosos. La condición de indígena no debe ser patente de corso ni manto de impunidad. O todos coludos o todos rabones. De lo contrario se corre el riesgo de dividir más a la sociedad. Hay la intención de socavar, no ya una autoridad municipal, sino a toda una ciudad por parte de quienes sabotearon la red de agua potable, la cual -en el mejor de los casos- podrá ser rehabilitada en unas tres semanas, si el gobierno estatal apoya con recursos económicos. Pero hasta dos meses nos podrían racionar el vital líquido, lo que de por si es grave, pero más cuando se es un destino turístico importante que genera una gran población flotante, la cual demanda abasto de agua, no solo para consumo y uso higiénico, sino también para las albercas de los hoteles y otros servicios que requiere el turista, Nos encontramos en plena temporada vacacional, y aunque los bloqueos carreteros afectaron la afluencia, aún sigue llegando turismo a esta zona. Ya puede el gobernador buscar donde poner otro aeropuerto, si primero no somete al imperio de la ley a estos delincuentes sociales. ¿De qué va servir contar con infraestructura, si cualquier grupito de facinerosos la toma o la bloquea para presionar al gobierno, como ocurre con las carreteras federales, donde la federación se ha visto omisa. Palenque requiere vivir bajo el imperio de la ley, no en la anarquía provocada por grupos vandálicos, muchos de ellos pagados para manifestarse, bloquear y sabotear, pues hay lidercillos que han hecho de la manifestación y el acarreo de indígenas una industria. Es el caso del dirigente de “Paz y Justicia”, “Sheba Tabla” quien engañó a “Coyolito” de que “toda su gente” votaría por él. A saber cuánto billete le bajó, pero apenas perdió la elección el “Maestro Yoda”, el “Sheba” y sus rufianes se fueron con el PT y los secuaces de Cruz Guzmán a los bloqueos y manifestaciones. Su voraz apetito por el billete y su modo de “operar” quedó de manifiesto con un desafortunado accidente carretero en el que el hijo de “La Pecheca” atropelló y mató a dos personas, parientes de David Pérez Oloarte, quien estaba teniendo dificultades para obtener la indemnización que por ley corresponde a los deudos. Se le acercó el “Sheba” y le propuso: “Si quieres, ahorita te bajo 200 gentes y los rodeamos. No digo si no te pagan de inmediato”, claro que no lo iba a hacer de a gratis, el “Sheba” quería su tajada de lo que se iba a cobrar. Más que “líder”, “zopilote”. ¿O no? Otro caso es el del candidato a regidor de “Coyolito”, Mario Álvarez, quien con la franquicia de la CUD invadió ranchos y propiedades privadas como pocos, razón por la cual Pablo Salazar lo puso tras las rejas varios años. Apenas salió del penal se declaró zapatista y con ese disfraz engañó a Luis H. Álvarez, quien lo vino a “resucitar”, y hasta el sub Marcos se prestó a ese juego. El hombre sigue haciendo lo que mejor sabe: invadir ranchos y propiedades privadas, pero ahora hasta exige programas y apoyos para “su gente” a quienes les cobra cuotas y les baja un billete por darles un pedazo de tierra invadida –que termina comprando el gobierno- o pasarles un programa productivo. Recientemente, el pasado día 16, con 50 familias invadió el predio “San Fernando”, de 300 hectáreas, sobre la carretera Villahermosa- Escárcega, propiedad de los Azcuaga, bajo el argumento de que estaba hipotecado por el banco y tenía el consentimiento de éste para meter gente ahí, lo que posteriormente fue desmentido por Bancomer, el cual llegó a un arreglo con los dueños para que paguen la hipoteca. Y ese era el regidor con el que Rafa Ceballos pensaba gobernar. Seguramente Mario Álvarez, como regidor ya no iba a invadir, sino a “expropiar”. De la que nos salvamos. Pero no es el único, desafortunadamente hay varios de esa calaña, como Mario Landero de la “Xinich”, otra organización que resulta parasitaria tanto del gobierno como de los pobres campesinos a los que dice representar, como se vio en el predio “Choles de Tumbalá”, propiedad invadida de la que los representados de Mario Landero fueron expulsados por zapatistas. Todos esos lidercillos son creaciones de diferentes gobiernos, que como los niños, primero inventan “El Coco” y después le tienen miedo. Pero con sus acciones, como en el caso de los secuaces de Cruz Guzmán, detienen y frenan el desarrollo de Palenque, pues dígame usted qué empresario en su sano juicio invertiría en Palenque donde no hay quien garantice ni la seguridad ni la estabilidad, donde -cuando a un grupito cuando se le pega la gana- tapa carreteras, altera la paz social o, como ahora, sabotea la red de agua potable. Habría que estar operado del cerebro para invertir bajo esas condiciones. Entonces de qué sirve que se proyecten supercarreteras –que de todos modos no hacen que porque los indígenas se oponen-, aeropuertos y desarrollos turísticos. Si no prevalece primero el estado de derecho, todo lo demás vale una pura y dos con sal. Al menos, es necesario reconocer que el gobierno no ha transigido ni lo hará en cuanto a juzgar penalmente a Cruz Guzmán y fincarle responsabilidades a quienes fueron sus cómplices. No hay reversa en su encarcelamiento y el cateo realizado este lunes pasado a las oficinas de “MC Construcciones”, de Miguel Ángel Cigarroa, a quien ha otorgado casi todas las obras de gobierno municipal el Sátrapa Ch’ol, y del que sus cercanos presumen que es su socio, va en ese sentido, como lo fue el tener preso a su director de obras públicas. Muchas obras públicas municipales de Cruz Guzmán son más “corrientes” que un naco, con materiales sin calidad, hechas al madrazo. Mientras que otras siguen inconclusas, pero ya están pagadas, y otras más son virtuales: existen solamente en el papel, pero el billete ya no está. Por otra parte también se nota la intención de ir “ajustando” a quienes están financiando su movimiento de resistencia y mucho se ha hablado de Cigarroa como tal, de la misma forma que algunos líderes volqueteros son mencionados como financistas importantes, por no hablar de situaciones más complejas y peligrosas. Veremos en qué para este asunto que seguramente seguirá dando que hablar, pues al parecer los secuaces del Sátrapa Ch’ol, aparentemente ya concluyeron su movimiento, pero no hay que darlo por hecho, pues del dicho al hecho hay mucho trecho, decía mi abuela. Parece mentira, pero hay muchos que se llenan la boca al decir que aman a Palenque, pero aprovechan la circunstancia para tratar de llevar agua para su molino. Es el caso de Martín Arellano, dirigente de la Unión Ganadera Local, quien ahora hasta amenaza con no permitir que se realice la Feria de Palenque si no le regresan las instalaciones –que por supuesto ni él ni la unión que preside invirtieron o construyeron- que se ubican en el terreno del Parque de Feria, cuyo comodato, a 27 años de existir, ahora desconoce. Toda esa infraestructura se hizo con dinero público y por lo tanto no pertenece a los ganaderos sino a todo el pueblo de Palenque, así que no salga ahora con que lo quiere enajenar porque es una “caballada” que si jurídicamente no ha logrado nada, solo le hará ganar el repudio de la gente. La tierra es de quien la trabaja, decía Zapata. ¿Qué ha hecho o cuánto dinero le ha metido la unión ganadera de Martín Arellano para que ahora salga tan brinconcito, cuando con la Rata ni siquiera chistaba? Ya habrá oportunidad de profundizar en el tema y se va a asombrar de la cantidad de apoyos que reciben del gobierno y los que han solicitado al ayuntamiento para la Expo Nacional de Ganado Brahmán. Pero luego salen con que nadie les da nada y todo lo que tienen es porque sus dirigentes lo han trabajado. ¡A otro perro con ese hueso! Nos leemos a la otra ¡Abur!