La Casa del Jabonero.
“Lo malo de ser pobre y avispado es
que te das cuenta de lo jodido que estás.
La ignorancia tiene sus bondades.
No hay que despreciarla.”
Anónimo (O sea yo).
La visita de Juan Sabines a Palenque tiene varias lecturas y, al margen de que en lugar de acto de gobierno más pareció una producción televisiva, con mega-pantallas, cantantes de “La Academia”, y cámaras de tele apuntando lo mismo a los apoyos entregados ahí mismo, como a los agradecidos beneficiarios de la generosidad gubernamental, producción en la que solamente faltaron las “catafixias”, al estilo de Chabelo (No me quiero ni imaginar a Roberto Serrano, el coordinador de giras del gober, ahora metido a animador oficial de gobierno, proponiendo a un beneficiario de Palenque: “Y ahora, decida usted ¿se queda con “La Rata Milpera” que se ganó a fines del año pasado, o le entra a la catafixia por un “Pirruris” devaluado?), la presencia del gobernante con los anuncios que realizó en cuanto a inversión de infraestructura productiva, es importante porque lo que importa es que la región importa al gobernante como plataforma de importantes estrategias turísticas que detonen la economía no solo de la región sino del estado, lo cual es de suma importancia (¡Uta, qué importante me vi! La neta es que con este fraseo redundante y chabacano ya hasta parezco director de Cocoso. Dicen mis amigos -los poquísimos que tengo-que no cojo Seriedad, dejen que la conozca y verán que la tal Seriedad deja de ser señorita y amargada).
Pero, hablando de amargados, el que se vio alicaído y contrito durante el evento que tuvo el gober en el Parque de Feria, fue al Lord Palencano, Juan Carlos I, duque de Chocoljaíto y Marqués de Las Maravillas, no Tenejapa, sino “Las maravillas” que prometió, pero no cumplió al manso electorado de este distrito, pues la presencia de Sami David, actual presidente de la mesa directiva del Congreso del Estado, lo amilanó todito y es que Sami vino en calidad de invitado especial de Sabines, y con ese oficio político que lo caracteriza, entró partiendo plaza y robando cámara a nuestro “representante” local, quien no tuvo que cuidarse de las cámaras televisivas, porque nunca lo enfocaron, para hacer pucheros de desconsolación, cada que el gober no lo veía. ¡Daba hasta ternura de tanto sentimiento!
Sin embargo, la política no es de sentimentalismos y esta columna pretende ser (cuando no se me escapa lo desmadroso) de análisis político, por lo que adentrémonos en esta escabrosa tarea de entomólogos para resaltar que el evento del gober, al margen de lo que pueda significar para el desarrollo económico de la zona, por lo que corresponde a proyectos de mediano y largo plazo, en el corto plazo tiene significaciones políticas relevantes que vale la pena resaltar. De entrada, el evento reunió a los tres actores políticos que ya se manejan como eventuales precandidatos a la diputación federal, y a uno más que no se había considerado inicialmente, pero que entra con más fuerza que los otros, a la luz de los grupos políticos que respaldan a cada uno de esos personajes.
Efectivamente, como diría los amantes de la tauromaquia, esos que saben de capotes, cornadas, chicuelinas y trajes de luces: “Cuatro Toros Cuatro” para el encierro del próximo año por la diputación federal. Claro que como señaló el periodista José Juan Balcazar, autor de la influyente columna “Confines” que publica en “Noticias, Voz e imagen de Chiapas”, periódico estatal que dirige, al reseñar el acto del gober en Palenque, hay uno de ellos que ni a “buey” llega, mucho menos a toro. Pero, para efectos publicitarios, lo tomaremos como tal. Pues sí, juntos pero no revueltos, en un mismo espacio geográfico pudimos ver lo mismo al Sátrapa Ch’ol (pintoresco como siempre), como al compugido Lord Palencano, o al embajador de la poderosa “Profa” Elba Esther Gordillo, quien ahora despacha como Secretario de Educación estatal, Javier Álvarez, yerno del “Chelo” Capdepondt, como al hasta ahora “tapado”, Sami David David, quien ha hecho de las curules federales su hábitat natural. Todos los “prospectos” estaban ahí y, en medio, el gobernador, como un César rodeado de patricios romanos, cuando los romanos ejercían la política del “Pane et circem” como fórmula pitagórica para asegurar la felicidad del pueblo. ¡Qué tiempos don Simón!
No se sorprenda usted, que no le empiece la taquicardia ni se le suba el colesterol. Sami David puede ser el próximo diputado federal por Palenque, obviamente por el PRI, y no por la vía plurinominal, sino por la de las urnas; es decir, compitiendo en la justa electoral del distrito I que actualmente ostenta la salteña Yary Gebhardt, de quien todos decían que no iba a llegar ni siquiera a ser nominada candidata del PRI y dejó con un palmo de narices al “Coyolito” Ceballos, de retorcido colmillo y melena alborotada, como también al eterno dirigente de la ganadera regional, Pedro Fonz (el hombre del feroz bigote y tierna mirada que beneficia solo a sus amigotes y familiares y ya tiene hasta la madre al resto de los ganaderos), así como a Cruz Guzmán quien aseguraba que solamente un indígena (o sea él y solamente él) podría ganarle a la apuesta perredista de Pablo Salazar y el ahora “Soñador”, “Burrén” Velázquez, el también indión, ex-munícipe de Chilón, de cuyo nombre, no como decía Cervantes Saavedra “No quiero acordarme”, sino es que ya ni me acuerdo, porque de carismático tenía lo que yo de diplomático para decir las cosas. O sea, ni madres.
Déjeme le platico que en la última Asamblea Nacional del Tricolor, esa a la que Arely Madrid llevó a “Mr. Clairol” Salvatti, no se si para sacarle un forzado a “La Gorda” Beatriz Paredes, o para intercambiar consejos cosmetológicos (otros dicen que para hacerlo diputado), los priístas modificaron sus estatutos y pusieron nuevos “candados” a los cargos de elección popular, uno de ellos es que quien ya ocupa uno por la vía plurinominal, o sea el dedazo de la dirigencia nacional, no puede ocupar otro por la misma vía. Es decir, si quiere su curul se la tiene que ganar en las urnas. Es el caso de Sami David, quien desde que la “concertacesión” Zedillista lo hizo perder ante Pablo Salazar la gubernatura de Chiapas, no sabe lo que es una campaña electoral, ahora tendrá que “entrarle a Torreón bailando” y parece que la pista elegida para este bailongo democrático es el distrito de Palenque, donde no hay figuras relevantes opositoras que le puedan sacar un forzado al experimentado Sami. Su única competencia real, si nos atenemos a la lista mencionada en el cartel taurino que reseñaba, sería Javier Álvarez, pues la “Novia de Choky” pesa más que Mazú en sus buenos tiempos, antes que tuviera que vender su rancho para pagar las deudas de campaña. La “Profa” es aliada de “Jelipe” Calderón y, júrelo que en esto de las curules federales, le va a “pasar factura” a quien despacha en “Los Pinoles”.
Pero no es la única factura que tendrá que pagar Calderón a sus asociados políticos, pues “il Padrino Beltroni” (“Capo dei tutti cappi”), ex-gobernador de Sonora, y Coordinador del Grupo Parlamentario del PRI en el Senado, también tiene cuentas por cobrar, y es precisamente con Manlio Fabio que Sami tiene una cercanía clave en sus aspiraciones de retornar a San Lázaro, para regresar a Chiapas dentro de 3 años para ver si ahora sí “baila mi’ja con el siñor”, independientemente de la bienquerencia de otros importantes políticos nacionales, como lo demostró al sacar a Lobato de la jugada, y del mismo gobernador Sabines, según se pudo apreciar en la visita del gobernante. La pelea, desde mi humilde trinchera, a no ser que se saquen otro As de la manga en el último momento, está entre Sami y Javier Álvarez, no tanto por sus méritos personales, mayores los del primero que los del segundo, sino por el peso específico de los grupos políticos nacionales a los que están integrados y su relación con el ejecutivo federal, pues no hay que olvidar que a quien más le interesa qué diputados federales van a quedar es precisamente a “Jelipe” Calderón, en el último trienio de su mandato. Si tiene mayoría de diputados, “afines” a sus iniciativas y proyectos de reformas, ya la hizo. Si no, ya valió. O sea, aquí quien va a partir el queso y a ponerle “Jorge al niño” es la federación y lo va a hacer a través de su nuevo secretario de gobernación, Gómez Mont.
Para aclarar más las cosas, Calderón no es Fox, a quien “le doraba la píldora” Pablo Salazar y hacía lo que quería. Los tiempos políticos no son los mismos. El país vive una de sus peores crisis: la crisis económica mundial, la caída del precio del petróleo, la devaluación del peso, la falta de inversión y generación de empleos, y para terminar de chingarla, la inseguridad que campea en todo el país, que ahora resulta que está peor porque la están combatiendo y que en la medida que se pongan más duros contra el crimen organizado la violencia se pondrá “más pior”, dijo el académico. ¡Qué alguien me explique! Porque o soy muy pendejo o me están tratando de ver la cara, lo que en términos absolutos y existencialistas me hace sentir igual, o sea “pendejo”. Y lo que es peor, sobretodo en alguien que vive de la palabra: redundante. Sí, también hay pendejez redundante, como pendejos redundantes hay. Es cuestión de semántica y enfoque. ¿O no?
Pero regresando a lo que nos ocupa y preocupa, Chiapas es un estado que depende casi en su totalidad, por la escaza planta productiva, por el rezago ancestral y por la indiada huevona –hay sus honrosas excepciones, pero cada día menos-, del presupuesto federal para poder sobrevivir. Eso lo entiende a plenitud Sabines. Lo comprendió inmediatamente que el tribunal electoral declaró ganador a Calderón, y como consecuencia lógica de su lucidez política, mandó a freír espárragos al “Peje” y se alineó en automático con Calderón, logrando a la fecha una excelente relación, en la que no cabe duda alguna que quien lleva la batuta es el inquilino de Los Pinos. No podría ser de otra forma. Chiapas no es Tabasco, ni Campeche, ni Yucatán, ni Quintana Roo. Chiapas es (verdad de Perogrullo) Chiapas y aquí la iguana masca de otro modo que en el resto del sur-sureste del país.
Dicho lo anterior, queda en contexto que –a la usanza de los viejos tiempos de hegemonía priísta- el gobernador llevará su terna al Palacio de Bucareli, donde sopesando lo que más conviene, no al gobernador, sino al Presidente Calderón, palomearán a algunos de los postulados por Sabines, le agregarán otros que no estaban en su lista y desecharán en automático aquellos que nada aporten al proyecto político del Ejecutivo Federal. Sabines supo cultivar, con apoyo del “Güero” Velasco, amistad y cercanía política con Juan Camilo Mouriño. Al fallecer el secretario de gobernación más cercano al presidente, Sabines perdió no solo un amigo, sino un actor político más receptivo a sus propuestas. Si Sabines con Mouriño podría haber colocado a cuatro diputados federales “suyos”, su cuota política con Gómez Montt, seguramente se reducirá a la mitad, por lo que no se puede dar el lujo de poner improvisados ni desleales a su causa. Los pocos tiros que le dan tienen que ser certeros para lograr los objetivos políticos deseados.
Es en esa coyuntura que las pretendidas diputaciones del Sátrapa Ch’ol y del “Marqués de Las Maravillas” suenan más a alucinaciones “panchanezcas”, producto de alguna hierba todavía verde y con semilla, que a posibilidades reales. ¿Qué le pueden aportar –ya sea separados o juntos, que para el caso es lo mismo porque de los dos no se hace un político completo- el aldeano Cruz Guzmán o el imberbe y novatón Juan Carlos López a Felipe Calderón? ¿A qué grupos políticos importantes a nivel nacional pertenecen –a no ser de su membrecía vitalicia en el P.U.P- que puedan resultar útiles al proyecto calderoniano? No, la diputación federal no se definirá ni con las trapacerías electorales en las que basa su esperanza el edil palencano –lo cual es un decir, porque nunca atiende a la gente como tal-, ni Juan Carlitos, en una amistad de estudiante con el gobernador, bajo el esquema IBM (o sea, “Y veme a comprar unas tortas, y veme a traer los trajes a la tintorería, y veme a llevar a la universidad…”).
No, ambos quedan fuera porque la diputación se va a decidir en las ligas mayores de la política nacional, a las que no pertenecen. Juan Carlos tendría que irse de nuevo por el PRD o lo que queda de él, partido que lo postuló y al que no pertenecía. Ya cumple el requisito de la residencia, pues se construye una –camino a las ruinas- de cerca de 3 millones de pesos. Y yo que soy bien burro para los números no me salen las cuentas ni sumando todas las quincenas que ha ganado desde que regresó a Chiapas con Sabines, para completar esa suma, en el supuesto que no comiera. Solo que sea porque no estoy contando lo que le aportan “de manera voluntaria” (como las cuotas de inscripción de las escuelas oficiales) los ediles del distrito para ayudarlo con sus gastos legislativos, lo que incluye algunos “aviadores” al servicio del aristocrático personaje. Pero, en tratándose de la diputación federal, no hace falta la residencia en el distrito, así que se la pudo –nos las pudimos, como contribuyente fiscales- habérsela ahorrado. La cosa es que desde donde lo quiera ver, a menos que sea usted un iluso al que le prometió algo el Lord y no quiera perder la esperanza, Juan Carlos está “Out” de esta jugada donde el PRD va a mostrar un retroceso espectacular por el desencantamiento del electorado y por el canibalismo de los amarillos.
Y por lo que respecta al Ch’ol, quien tal vez se esperanza en Dante Delgado, el dirigente de Convergencia, ya puede –como dicen los yucas- “ir matando su pavo”, pues Convergencia está en camino de ser el “asilo político” del “Peje” y cualquier candidato que salga con sus siglas llevará el “Beso del Diablo” y el “sospechosísmo” de Felipe Calderón. Ya ni hablar de lo mucho que ha dejado complacida a la paisanada con su inexistente administración, su latrocinio y prepotente trato. Aquí todos lo quieren…pero linchar. Por cierto, le mandan saludar los compas de Calatrava.
Tema político hay de sobra para comentar, derivado de los cambios que realizó el gober en su gabinete y los que se vienen en cascada, pero se agotó el espacio. Ya para cerrar con “broche de oro”, les cuento que va en serio, y estuvo feo, el pleito entre el Sátrapa Ch’ol y su otrora inseparable Mayito Rodríguez Damas, el que inició cuando el poquitero de Cruz Guzmán le peleó el producto de La Feria a su “gurú” de eventos especiales, también conocido como “El Bimestral” –por aquello de que le llaman “Mayo”, pero con la Feria hizo su “Agosto”. Y qué esperaba el edil, ¿Llevarse la tajada del León cuando ni siquiera sudó la talega en la organización del evento? ¿Qué, a poco no sabe que hubo que compartir con “rugidores” tan voraces como El Pote, que no fue el único, sino el más “notable” y ahora se frota las manos ante la idea de que en la próxima feria sea él quien mueva el pandero? La cosa es que después del pleito, en el que hasta mentadas de madre hubo, el Ch’ol desconoció a Mayito y, olvidándose de todo lo que le debe en términos de lealtad y otros valores entendidos, ordenó a los policías que cuidan la entrada de la “ratonera” municipal -es decir, el Palacio Edilicio-, que no se permita la entrada al buen Mayito, al que desde esta trinchera le brindo mi humilde solidaridad y le recuerdo que –como el CISEN- soy “todo oídos”, para cuando quiera “descargar su pena”. Me tocó ver en la bitácora de los policías la infame prohibición a que ingrese a las instalaciones municipales, y como también la fotografíe, pues la comparto con ustedes.
Lo único que me queda en duda, en relación al Palacio Municipal, y si alguien tiene la respuesta que la pase, es si el festón negro que adorna el acceso principal del ayuntamiento ¿es por el duelo de Mouriño…o por Mayito...? Total, los dos comienzan con “M” y los dos cayeron de “las alturas”. Seguramente, así lo espero, ambos ya han pasado a “mejor vida”. ¡Abur!
Por ahí me informaron que un tal Henry anda chayoteando políticos incautos en Tuxtla Gutiérrez bajo el argumento de que él escribe esta columneja. No tenemos representantes ni sucursales, y menos para los "chayos", así que por favor y de la manera más atenta si les llegan con ese cuento, a quien sea, mucho agradeceré lo manden a tiznar su madre y me pasen el chisme para balconearlo ipso facto. Ahora sí ¡Abur!
